En cinco años muchas cosas pueden pasar. Demasiadas. Pasó Passarella, pasó Simeone, pasaron Astrada, Gorosito, Cappa y JJ. Pero Ferrari siempre estuvo. Le ganamos a Boca varias veces y perdimos otras tantas. Luchamos vanamente por la Libertadores y por la Sudamericana. Vencimos a Corinthians en San Pablo y caímos con Caracas en Núñez. Y Ferrari siempre estuvo. Pasó el “silencio atroz” de Ahumada y el maíz de la San Martín. Dimos una vuelta olímpica en 2008 y en el mismo año fuimos cola de la tabla. Y pese a todo, Ferrari siempre estuvo.
Gestamos y vendimos figuras por millones, trajimos buenos elementos y otros de los cuales mejor no acordarse. Llenamos cientos de tribunas con aliento mientras otros, mas silenciosos, engordaban sus bolsillos con nuestro hambre. Usamos la banda roja, la tricolor, la negra, la violeta y hasta la ridícula gris. Le peleamos al julepe del descenso hasta que todo se derrumbó. Y siempre, absolutamente siempre, Paulo Ferrari estuvo.
El loncho se ha ido de River. Vuelve a su casa de Arroyito para pelear nuestra misma batalla desde otra trinchera. En tiempos de mediopelo y narcisismo, la pérdida de un referente siempre es un suceso de lamentar. Guita más, guita menos, jugando mucho, poquito o nada, Ferrari fue un eterno líder del silencio. Entrega sin carisma. Esfuerzo sin demagogia. Dinámica sin rating. En este 2011 en el que habrá que acostumbrarse a demasiadas cosas, ver la 4 millonaria sin el relleno de esa figura diminuta, persistente como una ardilla en eso de subir y subir, provocará alguna sensación parecida a la nostalgia.
223 partidos, 15 tantos oficiales (el lateral con más goles en la historia de River) y una dedicación encomiable por defender la causa, se ganaron estas líneas de despedida y este eterno gesto de respeto.
Gestamos y vendimos figuras por millones, trajimos buenos elementos y otros de los cuales mejor no acordarse. Llenamos cientos de tribunas con aliento mientras otros, mas silenciosos, engordaban sus bolsillos con nuestro hambre. Usamos la banda roja, la tricolor, la negra, la violeta y hasta la ridícula gris. Le peleamos al julepe del descenso hasta que todo se derrumbó. Y siempre, absolutamente siempre, Paulo Ferrari estuvo.
El loncho se ha ido de River. Vuelve a su casa de Arroyito para pelear nuestra misma batalla desde otra trinchera. En tiempos de mediopelo y narcisismo, la pérdida de un referente siempre es un suceso de lamentar. Guita más, guita menos, jugando mucho, poquito o nada, Ferrari fue un eterno líder del silencio. Entrega sin carisma. Esfuerzo sin demagogia. Dinámica sin rating. En este 2011 en el que habrá que acostumbrarse a demasiadas cosas, ver la 4 millonaria sin el relleno de esa figura diminuta, persistente como una ardilla en eso de subir y subir, provocará alguna sensación parecida a la nostalgia.
223 partidos, 15 tantos oficiales (el lateral con más goles en la historia de River) y una dedicación encomiable por defender la causa, se ganaron estas líneas de despedida y este eterno gesto de respeto.
9 comentarios:
Parece mentira, pero el "Loncho", jugo 5 años en RIVER, lo que en estos tiempos, suena mas que utopico, que un jugador este tanto tiempo en un club.
Mas bien ,parece de otras decadas.
Creo que fue de los pocos que se salvo del ultimo "incendio".
Tambien me pregunto, por que nunca tuvo una chance en la Seleccion, quisas si hubiera sido "europeo", lo llamaban al toque.
Va a ser raro tenerlo en contra, alguna puteadita le pegaremos, si se pasa de rosca, pero interiormente, nos vamos acordar cuando surcaba el lateral derecho. .
Lamentablemente también lo podemos asociar a esta última etapa infame para el fútbol del club con total sinceridad les digo que nunca me terminó de convencer porque su fuerte no era la marca en defensa y en ataque la mayoría de las veces no podía terminar bien lo que arrancaba . Los goles muchos los hizo de penal . De todas formas hay que agradecer su paso pero me parece que ya su etapa estaba agotada .
es el q mas jugo en la epoca infame con ese dudoso record basta para q a pesar de ser unos d los pocos q dio la talla en estos años pase como un o mas.
Marcado como uno de los que se fue al descenso y no solo por eso.Tambien por ser integrante del equipo que propició lo que todos sabemos: el que salió ultimo en el Apertura 2008, lejos el peor de la historia. A pesar de que no estuvo a la mini altura de un Villagra, de un Quiroga, de un Rosales o de un Salcedo o de varios más de aquel desastre futbolistico que propició éste.
Nunca tuvo marca o picardia para ocupar espacios hacia atrás y tampoco fue determinante yendo.
Aún a pesar de esto, y debe ser la calentura que aún me dura, fue rescatable en algún sentido y el único que marcó presencia en los ultimos partidos del Waterloo futbolero que pasamos: con San Lorenzo, Estudiantes (gol incluido) y Belgrano fue el unico jugador que no estuvo paralizado como si estuvieron el resto, salvo Gonzalez Pirez en Bahia Blanca.
Cosas del futbol.
Claudio
Dalmasito por favor tenes que hacer un post sobre este equipo vasco
El Sestao homenajea al River Plate vistiendo de franjirrojo
El Sestao River no olvida sus historia. Tomó su nombre de 'guerra' de aquel River Plate que arrasó en una triunfal gira por Europa en la década de los 50 y en el año más difícil de los 110 de historia del club 'millonario' la nueva directiva verdinegra encabezada por Pedro Mansilla ha querido rendir homenaje a su equipo 'hermano'. A partir de esta temporada la segunda equipación de los sestaoarras será franjirroja, aunque con un detalle muy sestaoarra como es la imagen del histórico horno Mari Angeles como fondo. En la parrte inferior trasera de la camiseta puede leerse además toda una declaración de intenciones: "Aguante River".
http://www.eldesmarquebizkaia.com/im...equipacion.jpg
lo lei y me emociono mucho, eso habla de nuestra grandeza
Gracias Centrojas.
Sabía la historia, no conocía este detalle.
Ya habrá algo al respecto. El "staff de creativos" está trabajando al respecto. jaja
De acuerdo con Marcelo de Mendoza. Lo respeto, pero la frontera entre su sobriedad y bajo perfil y la indolencia es tan débil, que para mí --con todo respeto-- cae del lado malo. No lamento su ida. Siempre me pareció que le faltaron cinco para el peso. Su ida ahora lo confirma, como por cierto la de Pavone, una vergüenza (deportiva) para el jugador. Aunque no estamos en tiempos en los que estas cosas cuenten, lo sé.
terrible pecho frio. Lo único rescatable del equipo que se fue a la B son los pibes: Lmela, Pereyra y demás
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