lunes, 30 de enero de 2012

HAY QUE PASAR EL VERANO

River Plate 0 - 1 Boca Juniors
Amistoso - Torneo de Verano 2012.

Estadio Malvinas Argentinas (Mendoza) - 29/01/12.



RIVER PLATE:
Vega (5); Abecasis (4), Maidana (6), Ramiro Funes Mori (5) y J.M. Díaz (4); Sánchez (6), Cirigliano (5), Ponzio (4) y González (4); Cavenaghi (5) y Trezeguet. Posteriormente Rogelio Funes Mori (4), Ocampos, Ríos y Aguirre. DT: Matías Almeyda.

BOCA JUNIORS: Sosa; Ruíz, Schiavi, Insaurralde y Sánchez Miño; Ledesma, Somoza, Erviti y Chávez; Mouche y Blandi. Luego Sauro, Colazo, Fernández y Araujo. DT: Julio Cesar Falcioni.
GOLES:
Pablo Mouche (BJ) 29 pt.

ARBITRO:
Saúl Laverni (bien)

MAN OF THE MATCH:
Carlos Sánchez (River Plate)

RESULTADO MORAL:
River Plate 1 - Boca Juniors 1.


2011 le dejará de por vida a los hinchas millonarios una coraza que pondrá los dolores y las penas en su justo lugar. Así las cosas, ¿da para calentarse con una derrota así?. No. ¿Da para preocuparse?. Eso sí. ¿Han servido para algo estos choques ante Boca?. Para poco, solo para sumar varias preguntas sin respuestas a nuestro extenso cuestionario. Varias, que podrían resumirse en dos. ¿Saben Passarella y Almeyda la ruta correcta para el camino de vuelta?. ¿Sabe este grupo de jugadores el peso histórico de lo que se viene?. Lamentablemente no hay un sí como respuesta. Tampoco un no, y eso es lo que más inquieta.
La moraleja es que a veces no es necesario que el cántaro vaya a la fuente tantas veces para romperla, sino que la clave está en saber ir, y sobre todo a una fuente de cristal como la que custodia malamente la defensa millonaria. Una cosa elemental deberá comprender River de este raid de duelos superclásicos en los que se quedó con las manos vacías sin ser menos que el rival: Ante la incapacidad de mantener el cero en su valla, si se llega enfrente, se debe golpear.
El resto de esta noche mendocina es todo chamuyo y carne de cañón. Boca lo ganó con una única contra precisa, más el valor de su defensa de hierro y su estrategia a la que catalogan de "inteligente", pero que a mi se me ocurre en extremo amarreta, pero allá ellos, no es nuestro problema. River fue más claro que en Chaco pero siguió carente de luces para resolver en las proximidades del área los anagramas defensivos del xeneize. Merodeo varias veces un empate que tal vez mereció. Pero no tanto como para hacer un escandalo.
Al fin y al cabo no dejó de ser este un buen entrenamiento para lo verdaderamente importante. Sin Román en cancha, este Boca ejecuta la partitura de gran parte de los equipos de la B Nacional, obvio, con mejores intérpretes.
¿Que fue el verano para River?. Nada, solo una peligrosa pérdida de tiempo en la espera de volver a jugar por los puntos y así seguir mitigando la angustia de estar donde estamos. Recuerdo que entramos a boxes allá en diciembre luego de un éxito trabajoso ante Patronato. Es hora de retomar, en el hervidero que será La Matanza, la ruta del retorno sin pifiar un cambio.

miércoles, 25 de enero de 2012

LA MISMA HISTORIA

River Plate 0 - 2 Boca Juniors
Amistoso - Torneo de Verano 2012
Estadio Centenario (Resistencia, Chaco) - 25/01/12.



RIVER PLATE: Vega (5); Vella (3), Maidana (5), Ramiro Funes Mori (4) y Arano (3); Ponzio (4), Cirigliano (5), Sánchez (4) y Domínguez; Cavenaghi (4) y Rogelio Funes Mori (4). Posteriormente González (4), Trezeguet (4) y Ríos. DT: Matías Almeyda.
BOCA JUNIORS:
Orión; Sosa, Schiavi, Insaurralde y Roncaglia; Ledesma, Somoza, Colazo y Chavez; Mouche y Blandi. Luego Sánchez Miño, Araujo y Fernández. DT: Julio Cesar Falcioni.

GOLES:
Nicolás Blandi (BJ) 6 pt. Nicolás Blandi (BJ) 33 st.

ARBITRO
: Diego Abal -regular-

ROJAS:
Alejandro Domínguez (River Plate), Facundo Roncaglia (Boca Jrs.)

MAN OF THE MATCH:
Nicolás Blandi (Boca Juniors)

RESULTADO MORAL: River Plate 1- Boca Juniors 2.

Como siempre, primero lo importante: Solo es un partido amistoso.
Le pasó a Passarella, a Gallego, a Ramón, hasta Pellegrini y Astrada. Detalles más detalles menos, desde hace varios años la película siempre es la misma. River perdona, Boca factura. En Chaco bastaron apenas los primeros cinco minutos para saber que la noche volvería a ser amarga. La furia inicial de River puso a Funes Mori ante dos inmejorables chances de marcar que el mellizo (para variar) dilapidó torpemente. En la primera de cambio, un esplendido cabezazo de Blandi adelantó a un Boca que hasta allí no daba pié con bola. Al rato Domínguez mandó al carajo a Abal tras una calentura irresponsable y lanzó por la borda toda aspiración seria de pelear el juego. Más tranquilo, el xeneize hizo lo que mejor le sale: Defenderse. Y River no llegó nunca más.

Con el impasse veraniego a punto de expirar, incomoda la idea de que el equipo siga sin mostrar una consistencia que lo haga minimamente confiable. Preocupa que Almeyda sea aún en DT a medio hacer y yerre planteos mucho más de lo aconsejable. Preocupa que la dirigencia no deje de hacer agua. Preocupa que la defensa recaiga en jugadorcitos como Vella y Arano o en pibes tiernos como Ramiro Funes Mori (O Abecasis, González Pírez o Pezzella). Preocupa que no se tolere el roce como estrategia del adversario. Preocupa que los refuerzos puedan aportar más que sus promocionados apellidos a un planteo que ha cambiado radicalmente. Preocupar no saber cual será la respuesta cuando lleguen las horas decisivas donde los nervios y el temple pesen tanto como la calidad técnica y el sentido colectivo. Si este verano nos pone definitivamente los pies sobre la tierra y las prioridades en orden, será un verano beneficioso. Pero eso -por ahora- es incomprobable.
Boca ganó bien porque tiene claro lo que quiere y sabe como hacerlo. Pasará rápido, la derrota no duele porque demás está decir que nuestra batalla es otra.
Ah, como detalle lúgubre de la misma película que se repite sin cesar, a los 6 minutos Pablo Mouche picó al claro a buscar un pase de Franco Sosa. De su centro llegó el cabezazo de Blandi para el 1-0. Mouche picó claramente en off side que el árbitro Diego Abal no sancionó. Una vez más. Otra vez más.

LA TERCERA Y LA MEJOR


Hay que buscar mucho en el fútbol internacional para encontrar un equipo que tenga dos camisetas que lo identifiquen inmediatamente en cualquier lugar del universo sin necesidad de preguntar quien juega. River Plate es uno y si encuentran algún otro, por favor díganmelo. Se sabe, el millonario es su banda roja cortando con su tajo de pasión el inmaculado blanco de su paño. Pero también River es esta lluvia de bastones verticales blancos y rojos, delimitados tenuemente por una delgada línea negra, insignia fundamental de los primeros años de amateurismo y reemplazo elegante cuando la banda se impuso por su propio peso con la llegada del profesionalismo.
Sin pretender reprimir la evidente subjetividad que asalta al fanático, las casacas de River son perfectas. Los diseños simples y de buen gusto, el maridaje eterno del rojo y blanco, en la combinación, y el papel fundamental que juega el negro como agente cromático de contraste y elegancia. Sin ese color, la indumentaria de River pierde fuerza y magnetismo. Y sobre todo no respeta su esencia.

La camiseta tricolor está muy metida en el corazón del hincha, asociada a los confines de nuestra historia y al recuerdo de tantas tardes memorables. Hace unos pocos días, el website ingles www.subsidesports.com dio a conocer los resultados de su encuesta anual sobre cual fue para sus internatuas la casaca mas linda de toda la temporada 2011. La alternativa millonaria resultó la tercera. Delante suyo fueron elegidas la tercer casaca del Corinthians de San Pablo y la suplente del Borusia Dortmundt de Alemania, ambas de bonitos diseños, pero tan impersonales que bien podrían pasar por prendas para salir al boliche. En esa elección resultó séptima la bella indumentaria que umbro le confeccionó a la selección de Perú. Demás está agregar sobre cual es el diseño y los colores que la identifican.

La elección no descubre nada que no sepamos. Pero es un mimo al corazón en tiempos donde la pérdida de nuestra identidad duele tanto como la pérdida de la categoría.

martes, 24 de enero de 2012

LA INSOPORTABLE LEVEDAD

River Plate 0 - 0 Estudiantes (La Plata)
Amistoso - Torneo de Verano 2012
Estadio J.M. Minella (Mar del Plata) - 14/01/12.


RIVER PLATE: Vega; Abecasis, Maidana, Ramiro Funes Mori y J.M. Díaz; Sánchez, Ciricliano, Ocampos y Domínguez; Cavenaghi y Rogelio Funes Mori. Posteriormente Arano, Ponzio, Vila y Ríos. DT: Matías Almeyda.
ESTUDIANTES: Albíl; Mercado, Cellay, Desábato y Ré; Iberbia, Braña, Veron y González; Fernández y Boselli. Luego Gissi, Gil, Coria y Modón. DT: Juan Manuel Azconzábal.
GOLES: No hubo.
ARBITRO: Germán Delfino.

Comprenderán que el relax estival estimula y exige el desenchufe de la
mayoría de los cables que conectan con la realidad. Entre ellos el cable de la pasión. El 14 y el 19 de Enero River Plate jugó sus dos primeros partidos de pretemporada de los cuales vi poco (0-0 ante Estudiantes) y nada (triunfo 2-1 sobre Racing). Dejaré para ustedes, si así lo desean, realizar los aportes que crean oportunos para enriquecer este post. Para lo que de y sino no importa. He dejado de creerle al verano. Hubo un tiempo en que sus partidos valían verdaderamente la pena. Hoy de aquellos años solo quedan gratos recuerdos anudados al inconsciente por la soga de la nostalgia. Bien sabemos que lo que ocurre ahora es, en buena medida, una farsa mediocre construida para que la publicidad se luzca. Veremos volar varios globos aerostáticos que se desinflaran lógicamente cuando comience lo importante. Hasta allí, el verano navegará entre los espasmos de abstinencia de un fútbol en la cúspide de su insoportable levedad.

River Plate 2 - 1 Racing Club
Amistoso - Torneo de Verano 2012.
Estadio J.M. Minella (Mar del Plata) - 19/01/12.


RIVER PLATE: Vega; Vella, Maidana, Ramiro Funes Mori y Arano; Ponzio, Cirigliano, Ocampos y Domínguez; Cavenaghi y Rogelio Funes Mori. Posteriormente J.M. Díaz, Sánchez, Trezeguet y Abecasis. DT: Matías Almeyda.
RACING CLUB: Saja; Cáceres, Martínez, Cahais y Litch; Pilloud, Yacob, Espinoza y Castro; Moreno y Gutiérrez. Luego Aued, Zucullini y Viola. DT: Alfio Basile.
GOLES: Rogelio Funes Mori (RP) 5 pt. David Trezeguet (RP) 39 st. Teófilo Gutiérrez (RAC) -penal- 44 st.
ARBITRO: Pablo Lunati.

miércoles, 11 de enero de 2012

JOSÉ LUIS VILLARREAL

River Plate 1993/1995 - 14 partidos – 2 goles – 2 títulos.


Lo siguiente ocurre asiduamente en cualquier prueba de elementos juveniles del país. “De que jugás?” le pregunta el entrenador al pibe. “De doble cinco” es la respuesta del mocoso. De doble cinco!!!, y uno supone que si Pipo Rossi viviera lo agarraría de las orejas y lo colgaría del travesaño pa’ que aprenda. Cambió la vida, cambiaron las costumbres, cambiaron las modas, y por supuesto, también cambió el fútbol. Estropeado de tacticismos supuestamente efectivos, adaptado para lo que se privilegie sea el físico y no la técnica, bajando la barrera de talento exigida para ser jugador de Primera. No da para quejarse de que el fútbol sea hoy una pista de autitos chocadores. Tal vez sí para liberar un suspiro de nostalgia por aquel tiempo donde a cada puesto le correspondía un número y cada número definía mejor que nadie las características del jugador.
José Luis Villarreal era un cinco nato. No uno a la antigua usanza de los centrojás del cuarenta, cincuenta y sesenta. Pertenecía mas bien a aquella cofradía de volantes centrales surgida a principios de los ochenta y que tuvo sus mejores estereotipos en Sergio Batista, Claudio Marangoni y Fernando Redondo. Dotado de técnica, despliegue elegante, pase al pié, frente en alto, estilo depurado. A Villarreal le sobraba riqueza para incluso correrse a la punta derecha y volantear por ese sector. Hoy, a la vista de sus virtudes, sería el enganche indiscutido de cualquier equipo.
Villita no tuvo suerte en River. Su camino se pobló rápidamente de obstáculos a causa de la que siempre fue su peor enemiga. La rodilla. Venía de 5 años en Boca y de un semestre complicado en Atlético de Madrid, peleado con Jesús Gil y Gil. Quiso el destino que su debut sea en una Bombonera hostil por la Copa Centenario a mediados de 1993. Curiosidades que otorga la idiosincrasia dispar de ambas Riberas. Mientras el Negro rendía sus mejores años, ganaba un título y llegaba a la Selección de Basile con la azul y oro, el hincha xeneize no pudo nunca dejar de recelar esa “inaceptable” costumbre de no ir al piso a recuperar la pelota a la par de Blas Giunta, su ídolo de aquellos años. En River en cambio, la onda fue inmediata y recíproca. No había prejuicio por su pasado inmediato ya que su salida de Boca no fue la mejor, y a decir verdad, Villarreal llenaba con creces todos los requisitos exigidos por el famoso paladar negro riverplatense.
Nunca pudo jugar más de 3 partidos seguidos. Las lesiones y la figura ya intocable de Leonardo Astrada lo relegaron. Arrancó el Apertura 93 con expectativas pero en la 4ª fecha en un partido ante Vélez, los ligamentos lo postraron casi un año. De su vuelta en el Apertura 94 se recuerda un derechazo mordido en el arco del Río de La Plata con el que definió un clásico ante Independiente y un par de buenos partidos hasta su nueva lesión. Babington lo recuperó para el inicio de la campaña de 1995 y lo tenía bien considerado en sus prioridades, pero luego de 5 partidos otra vez la rodilla lo paró en seco para siempre con la banda roja.
Negro piernas chuecas, rulos de cuartetero, cordobés de pura cepa. Había irrumpido como gran promesa desde Belgrano, donde fogueo su temperamento en los durísimos Regionales y en la incipiente B Nacional. Compartió un histórico mediocampo con Juan José López y Germán Martellotto. Tuvo un largo y dispar paso por Boca y algunas –pocas- chances de jugar en la Selección de Basile. Tras River pasó por Montpellier de Francia, Pachuca de México, Estudiantes de La Plata, All Boys de Floresta y la vuelta a casa para retirarse en Belgrano.
Hoy existen pocos jugadores con las características de Villarreal. Se juega a otra cosa, con otro ritmo, con otras prioridades, con otras urgencias. Siempre defendió las banderas del fútbol bien jugado, la técnica, el buen gusto, el respeto supremo por la calidad del espectáculo que se le ofrecía al espectador. Los hinchas de River que supimos de buenos tiempos, jamás dejaremos de respetar “eso” en un jugador con nuestra camiseta.

viernes, 6 de enero de 2012

CAMPAÑA 1959


El 1 de enero Fidel Castro y sus barbudos entran victoriosos en La Habana. La Revolución Cubana ha triunfado. Meses después sufrirá la baja sensible de uno de sus principales lugartenientes: Camilo Cienfuegos, muerto en un confuso accidente aéreo. Surge en el País Vasco la Euzkadi Ta Azkatazuna, su política radical y extremista la hará famosa a nivel mundial solo con su sigla (ETA). Las Naciones Unidas realizan la Declaración Universal de los Derechos del Niño. 12 países firman el Tratado Antártico en la ciudad de Washington. Nacen Gustavo Cerati, Juan José Campanella, Victoria Abril, y Evo Morales
En Argentina, el Presidente Arturo Frondizi comienza a verse acorralado por Militares (por haber pactado con Perón) y Peronistas (por no cumplir con lo pactado). "Hay que pasar el invierno" dice el Ministro de Economía Álvaro Alzogaray, mientras varias huelgas le salen al cruce. Aerolíneas Argentinas recibe su primer jet para volar a Europa. Frondizi se entrevista con Dwight Eisenhower, Golda Meir, Andre Malraux y Fidel Castro. La Selección Argentina lava un poco la pálida imagen del Mundial de Suecia obteniendo en forma invicta la Copa América jugada en Buenos Aires. San Lorenzo de Almagro, gracias a los goles de Sanfilippo, logra ganar cómodamente el Campeonato de Primera División.
El 12 de Octubre Ángel Labruna juega su último partido con la casaca de River en una derrota 0-3 ante San Lorenzo. Es una campaña escuálida para River Plate, quién concluye 5º a 13 puntos del campeón. River contrata al zaguero de Lanús José Manuel Ramos Delgado y será la mejor compra de la temporada. El resto (Ciaccia, Rosello, Domingo Rodriguez, Gómez Sánchez) no aportan demasiado. Se pierden los 2 clásicos ante Boca, uno de ellos por escándalo, 1-5 en la Bombonera un lunes por la tarde. Norberto Menéndez concluye como goleador con 14 tantos.

CAMPEONATO AFA 1959

1- Lanús 2-2 - Menéndez (2) / Blanco, Guidi.
2- R. Central 2-1 - Zárate, Rosello / Rivero.
3- Boca Jrs. 1-5 - D. Rodríguez / Yudica (2), Nardiello, JJ Rodríguez, Mansilla.
4- Gimnasia (LP) 2-1 - Labruna, Nuín / Arrambide.
5- Independiente 0-1 / Carbone.
6- Atlanta 1-0 - Ciaccia.
7- Vélez Sarsfield 2-1 - Menéndez, Gómez Sánchez / Conde.
8- San Lorenzo 1-2 - Nuín / Boggio (2)
9- Central Cba. (Rosario) 0-1 / Federico.
10- Newell's O.B. 1-2 - Rosello / Urquiza, González
11- Racing Club 3-2 - Ciaccia (2), Menéndez / Belén, Sosa.
12- Estudiantes (LP) 0-2 / Infante, Ruggeri.
13- Argentinos Jrs. 2-1 - Zárate, Sarnari / Sciarra.
14- Ferro C.O. 1-2 - Sarnari / Lugo, Berón.
15- Huracán 3-3 - Menéndez (2), Luraschi / Rossi (2), Cañete.
16- Lanús 2-1 - Menéndez, Zárate / Curia.
17- R. Central 2-1 - Menéndez, Onega / Colla.
18- Boca Jrs. 2-3 - Melón, Nuín / Yudica, JJ. Rodríguez, Nardiello.
19- Gimnasia (LP) 0-2 / Domínguez (2).
20- Independiente 1-0 - Leardi.
21- Atlanta 0-1 / Griguol.
22- Vélez Sarsfield 3-2 - Gómez Sánchez, Valentino, Melón / Avio, Espinoza.
23- San Lorenzo 0-3 / Sanfilippo, Boggio, García.
24- Central Cba. (Rosario) 2-0 - Onega (2).
25- Newell's O.B. 1-2 - Menéndez / Merighi, Schneider (ec).
26- Racing Club 3-2 - Sarnari (2), Menéndez / Ferrero, Murúa.
27- Estudiantes (LP) 5-0 - Onega (2), Menéndez (2), Sarnari.
28- Argentinos Jrs. 1-1 - Zárate / Scialino.
29- Ferro C.O. 5-0 - Ramaciotti, Onega, Zárate, Menéndez, Sarnari.
30- Huracán 1-1 - Menéndez / Diz.

FORMACIÓN BASE: Amadeo Carrizo -Manuel Ovejero-; Alfredo Pérez -Juan Carlos Valentino- y Federico Vairo; -Julio Nuín-; Oscar Mantegari, José Manuel Ramos Delgado -Juan Carlos Schneider- y Ricardo Ramaciotti; -Juan Uriiolabeitia-; Oscar Gómez Sánchez -Luis Ciaccia-, Juan Carlos Sarnari -Domíngo Rodríguez-, Norberto Menéndez, Ermindo Onega -Ángel Labruna- y Roberto Zárate -Emilio Melón-.


GOLEADORES:
Norberto Menéndez 14- Ermindo Ángel Onega 6- Juan Carlos Sarnari 6- Julio Alberto Nuin 3- Luis Ciaccia 3- Iseo Fausto Rosello 2- Oscar Gómez Sánchez 2- Emilio Melón 2- Domingo Rodríguez 1- Ángel Amadeo Labruna 1- Galdino Luraschi 1- Mario Leardi 1- Juan Carlos Valentino 1- Ricardo José María Ramaciotti 1.


Gracias: Centrojás!.

martes, 3 de enero de 2012

UN DURO


Mirá vos. Tuvieron que pasar 2 años, 64 partidos, un descenso, 924 foules, un millón y medio de chambonadas, para darme cuenta de que con Ferrero se sentía algo vagamente parecido a lo que llaman seguridad. No colgaremos ningún cuadro en su honor. Tal vez ni siquiera se lo extrañe demasiado pasado un tiempo. Hartos ya del lastre de pataduras que nos hundieron, Ferrero (uno de ellos) se lleva sin embargo una buena cuota parte de algo que no se compra en cualquier negocio de variedades: La personalidad y sangre.
Se va de River un duro. Un rústico inimaginado con nuestros colores décadas atrás. Alguien que fue capaz de convertirse en grito de guerra de una tribuna otrora exigente cuando un resultado venía torcido. Se va alguien al que no le pesó jamás el kilaje de una casaca con mucha historia a cuestas. Dió todo lo que traía encima. Humilde trotamundos de cuanta categoría haya en nuestro país, un bartolero por excelencia, un cable pelado peligroso de foul, un agarrón innecesario, un carromato lerdo en campo abierto. Pero sobre todo Alexis Ferrero fue un tipo dispuesto, un profesional que supo bancar y poner la jeta. Una personalidad avasallante que generó contagio. Alguien al que siempre debieron recurrir cuando las papas quemaron.
Demás está decir que River enterró las banderas de la historia mucho tiempo antes de contratar a Ferrero. Será pues un signo de todo lo mal que estamos ponerse a escribir un par de líneas para su despedida. Que es necesario limpiar del equipo las caras del descenso?. Ok. Que era un patadura comprobado?. Ok. Que atras vienen pibes que prometen?. Ok. Lo cierto es que la 2 que engalanó los talentos de Vaghi, Alfredo Pérez, Ramos Delgado, Perfumo o Roberto Ayala, hoy buscará sin encontrar en el vestuario a este querible picapiedras que siempre sumó para la causa. Y no está bueno que los que suman se vayan de River.